Icebergs - I
Había visto un mapa del mundo impreso en algún país del cono sur. Todo estaba invertido: su costa del mar Báltico caía hacia abajo, y en el lugar donde debería figurar la Antártida descansaba ahora el Polo Norte. Tierra del Fuego, el Cabo de Buena Esperanza y otros nombres evocadores señalaban hacia un sur que marcaba el techo del mundo. Esa mirada diferente de las cosas le dejó hipnotizado, como si los horizontes desconocidos del otro lado del planeta albergaran todavía la posibilidad de hacer las cosas distintas al uso de occidente, un lugar donde, tal vez, se pudiera empezar de nuevo.